Lomopoesía. O poemas escondidos en tu biblioteca

Reconozcámoslo: a menudo compramos libros por el título. Es la primera propuesta del autor. Esa que tiene que captar tu interés. De entrada, un título del estilo “Manual teórico sobre…”, llama poco la atención, a menos que sea sobre algo de lo que en ningún momento te esperas un manual teórico. Luego, por supuesto, ya es responsabilidad del autor cumplir con la promesa que hizo en la portada. O en el lomo, que suele ser la primera impresión de un libro; su mejor perfil. Todos, uno al lado del otro, compitiendo por llamar la atención, en un espacio de tres, a lo sumo cinco centímetros de ancho por esos veinte de alto. 

Desde pequeña que me ha fascinado ver las estanterías llenas de libros, cual escaparate de propuestas. Me paseaba de un lado al otro del estante, leyendo los títulos en los lomos, ladeando la cabeza a un lado y otro; pellizcando, de vez en cuando, ese que me seducía, para mirar la portada, a modo de segunda cita.

Por eso me fascinó la propuesta de la artista Nina Katchadourian titulada “Sorted Books” cuando lo conocí: un proyecto que empezó en 1993 y que ha ido extendiéndose desde entonces. Se trata de elegir ciertos títulos de una biblioteca y componer una afirmación, poesía o visión combinándolos. Contemplados en conjunto, estos pequeños grupos de libros pueden funcionar para explicar la visión que aporta la lectura de esos libros. O como retrato del propietarios de la biblioteca. Aunque a mí me gusta hacerlo de manera más lúdica, simplemente buscando pequeñas poesías o a veces incluso haikus, en las estanterías. 

Me di cuenta, por ejemplo, de la búsqueda que hice -o parte de ella- en mi proceso creativo: